Encantadora casa de vacaciones al borde del bosque, situada en una zona muy tranquila, lejos de la vida de la ciudad. Frente a la casa de vacaciones hay un pequeño río. Los 2 dormitorios son acogedores y cómodos y ofrecen espacio para 4 personas: perfecto para una familia.
En los alrededores hay muchas y hermosas rutas de senderismo y cuevas de la Edad de Piedra. Sin duda, merece la pena visitarlas. El Condroz es una hermosa región con muchas granjas y castillos. Otro buen consejo es el monasterio bizantino de Chévetogne. También hay muchos museos en los alrededores.
La gran terraza ofrece la oportunidad de relajarse. La combinación de cultura y naturaleza hace que la estancia en esta casa de vacaciones sea especial. Hay una plaza de aparcamiento en la casa.